Experta en comunicación y marketing digital gastronómico, se animó a inventar desde cero Buenos Aires Food Week, dirigido a los amantes de la alta cocina, y LadiesBrunch, una comunidad de emprendedoras en busca de potenciar sus proyectos. Dice que hoy disfruta de su casa porteña tanto como de viajar y crear eventos únicos para las mujeres.

Txt: Dolores Vidal Ph: Gentileza Marina Ponzi

No hay atajos en la vida, hay que andar el camino. El recorrido de Marina Ponzi refleja cómo cada paso resulta, muchas veces, una huella perfecta para alcanzar la próxima meta. Emprendedora por temperamento, gourmet de alma y con una enorme vocación por comunicar, tiene el instinto y la destreza de imaginar una y otra vez distintos eventos-experiencias con un gran poder multiplicador.

 

¿Cómo evolucionó tu vida desde esa multitudinaria primera Guerra de Almohadas, que organizaste en 2006 en el Planetario, hasta hoy?

Ya pasaron 11 años y puedo decir que mi vida evolucionó de formas impensadas. En ese momento aún estaba estudiando en la universidad y comenzando a pensar cómo orientar mi carrera en Comunicación, que es muy amplia y con diferentes posibilidades en lo laboral. La Guerra de Almohadas, que convocó a más de 3 mil personas, fue un gran puntapié para decidirme a enfocar en marketing y comunicación online. Descubrí el poder que tenía internet (y lo digo en general, porque en 2006 ni siquiera teníamos Facebook) para potenciar mensajes y nuevas ideas. A partir de ahí, recorrí un largo camino en diferentes empresas y proyectos propios, donde adquirí conocimientos en marketing digital y eventos que me llevaron adonde estoy hoy.

¿Cuáles son tus fortalezas como emprendedora?

Soy práctica, sincera y perseverante. No me gusta dar vueltas, voy al grano, y si algo no funciona, intento otra forma de hacerlo. No me doy por vencida fácil y le dedico mucho tiempo y esfuerzo a cada uno de mis proyectos.

¿Cuáles fueron los mayores obstáculos con los que te encontraste durante estos años? ¿Cómo fuiste superándolos?

Creo que el mayor obstáculo que tenemos las mujeres, en general, es no confiar en nosotras mismas y en nuestros proyectos. En muchos casos arrancamos con dudas y eso hace que el crecimiento sea más lento. A mí me pasó varias veces el arrancar como un ‘hobby’ proyectos que tenían todo el potencial para ser negocios rentables. El problema fue que no me la creí lo suficiente como para hacerlos crecer desde un primer momento. Esas dudas las fui superando de a poco, con mucha prueba y error. Me di cuenta de que cada cosa que me daba miedo hacer o decir, una vez que la llevaba a la práctica, me otorgaba buenos resultados. Así fue creciendo mi confianza y, por ende, mis proyectos. Es un proceso por el que todas debemos pasar y cuanto más conscientes seamos, más fácil vamos a superar nuestras propias dudas.

¿Cómo y por qué nació LadiesBrunch?

Nació de mi deseo de conectarme y conocer a otras emprendedoras, y no haber encontrado nunca el espacio adecuado para hacerlo. Así decidí armar un blog y empezar a organizar un encuentro mensual con el ‘brunch’ como factor clave de reunión, ya que desde siempre disfruté mucho salir a comer y conocer nuevos lugares. La comunidad creció orgánicamente en los últimos ocho años, cada vez se suman más mujeres, y al día de hoy ya pasaron por nuestros eventos más de 4 mil emprendedoras.

¿Hacia dónde va a crecer esta red?

Este año tomé la decisión de que LadiesBrunch dejara de ser un ‘hobby’ y se convirtiera en un negocio. Parte de esta decisión implicó sumar a una persona a mi equipo que pudiese brindarme soporte en el proceso, como también definir nuevas propuestas para las ‘ladies’ de la comunidad: por ejemplo, los “círculos de ladies”, capacitaciones con mentoras expertas, sesiones de fotos profesionales y otras propuestas que estamos por lanzar. Para el próximo año vamos a sumar embajadoras en diferentes países de Latinoamérica y seguir desarrollando propuestas de valor para que todas las mujeres emprendedoras y profesionales cuenten con el apoyo de LadiesBrunch cuando necesiten conectarse, aprender nuevas habilidades y crecer en sus proyectos.

Antes de LadiesBrunch, creaste el evento bianual Buenos Aires Food Week, que ya va por su décima edición y que invita a disfrutar durante una semana menús de gran nivel a precios accesibles. ¿Por qué apuntaste al rubro gastronómico?

Fue puramente por gusto. Desde chica sentí siempre un interés por los restaurantes y los hoteles. Es más, hasta pasé por la etapa de querer ser chef. Pero, con el tiempo, me di cuenta de que mi relación laboral con la gastronomía iba a ser desde la comunicación. Así uní dos de mis grandes pasiones y pude desarrollar cada uno de los proyectos que hoy llevo adelante: LadiesBrunch, Buenos Aires Food Week y Agencia Nopal. Todos tienen un foco gastronómico muy importante.

¿Te seguís capacitando?

Sí, dentro de los “círculos de ladies”, que son capacitaciones mensuales de diferentes temáticas de negocios con mentoras expertas. Los grupos están integrados por 10 mujeres como máximo, por lo cual se genera un aprendizaje personalizado, súper valioso para todas. También trabajo con un consultor de negocios que me acompaña en mi crecimiento profesional.

¿Qué es lo que más te gusta de tu trabajo?

Me encanta generar experiencias relacionadas con el disfrute y ver que las personas que participan la pasan muy bien. Me gusta ver los resultados del esfuerzo que implica llevar a cabo eventos como los Brunch de Networking y Buenos Aires Food Week, y observar cómo las personas disfrutan de ser parte de esas experiencias. También me encanta el proceso de producción de los eventos y trabajar con personas que me complementan en temas que yo no manejo, porque es ahí donde los proyectos ganan nuevas dimensiones.

Sos inquieta, ¿cuáles son tus próximos desafíos?

Hoy mi principal desafío es trabajar para que la comunidad de LadiesBrunch siga creciendo a nivel regional. Y crear eventos únicos que nos potencien para sentirnos cada día mejor con nosotras mismas y nuestras profesiones.

Y en la vida personal, ¿qué tenés en agenda?

Estoy feliz en pareja y, por el momento, no está en nuestros planes tener hijos. Aunque seguro son un proyecto para dentro de algunos años. Y siempre tengo en carpeta algún viaje. Quiero ir al menos una o dos veces al año a lugares que me generan curiosidad, por ejemplo, en octubre nos vamos con mi novio a Japón.