Los dos polos

En un recorrido por la pura naturaleza australiana, nos adentramos en su vasto desierto y su emblemático arrecife de coral.

Txt: María Clara Mayer
Ph: Gentileza Tourism Australia

 

Agua y desierto, desolación versus vegetación, rojo o azul. Así son los extremos que encierra Australia. Un mundo antiguo y sabio en el centro, y un paisaje subacuático lleno de milagros en sus orillas. Y es que Australia debe ser el único lugar en el mundo en el que la premisa “los extremos no son saludables”, no aplica. Por un lado, el país posee uno de los mejores y más frondosos arrecifes de coral y por el otro, el quinto desierto más grande del mundo.

La Gran Barrera de Coral es una de las siete maravillas del mundo natural, es más grande que la Gran Muralla China y la única cosa viva en la tierra visible desde el espacio. El parque marino se extiende sobre 3000 kilómetros paralelos a la costa de Queensland. Es decir, una distancia similar a la que separa Madrid de Budapest. Se trata de una reunión de coral brillante y vivo que permite a los buzos observar un universo acuático único.

Sucede que el arrecife reúne una de las mayores colecciones de biodiversidad del mundo. Moluscos, rayas, delfines, tiburones, más de 1500 especies de peces tropicales, más de 200 tipos de aves, alrededor de 20 tipos de reptiles, incluyendo tortugas marinas y almejas gigantes, se reúnen en su enorme extensión.

Para conocer la Gran Barrera de Coral se debe contratar una excursión desde alguna de las ciudades más cercanas. Desde Harvey Bay se puede tomar un ferry hasta la isla Fraser, una franja de tierra alargada repleta de pastizales submarinos que son frecuentados por ballenas, tortugas y manaties. Entre las muchas rarezas que contiene la isla, hay un bosque sobre arena con árboles altos como secuoyas y helechos prehistóricos.

A pocos kilometros de Harvey Bay se encuentra la ciudad de Bundaberg. Desde ahí es posible visitar las islas Lady Elliot y Lady Musgrave. De las dos, la segunda está menos explotada y propone un contacto más puro con el arrecife. Luego se encuentra Mackay, puerto que enlaza con Whitsunday, un archipiélago compuesto por un centenar de islas escarpadas y rodeadas por corales submarinos a pesar de su distancia del arrecife.

Los dos polos

A cuatro horas de Mackay está la ciudad más grande de las que se asoman a la Gran Barrera: Townsville. Desde allí, un viaje de 20 minutos en barco es suficiente para arribar a Magnetic Island, isla donde se pueden dar cómodos paseos a lo largo de senderos flanqueados por eucaliptos a los que se abrazan los koalas.

Pero posiblemente, entre todas las islas del área, la más imponente es Hinchinbrook, que cuenta con la más larga de las 600 islas continentales que conforman el arrecife. Hinchinbrook invita a explorar laberintos de manglares y playas de arena blanca, y también a adentrarse en el bosque y subir a lo alto de cimas panorámicas. Se ubica en las cercanías de Cairns, otra importante base turística del norte de Queensland. Desde ahí, es posible visitar el bosque lluvioso de las Atherton Tablelands, una meseta volcánica a la que sube una locomotora de 1891. También hay que ir a la península de Cape York, el extremo norte de Australia y, claro, la Gran Barrera, a la que se programan excursiones de un día.

Los paseos son normalmente de un día entero, pero se pueden extender dependiendo el presupuesto con el que uno cuente. Generalmente los tours ofrecen variedad de opciones: buceo de día y de noche, snorkel, kayak, paseo en barco con fondo transparente o trekking. Los tours comienzan a las 8 de la mañana hasta las 5 de la tarde, brindan los materiales de buceo (máscara, patas de rana, respirador) y almuerzo o merienda. El precio de las excursiones varía según la distancia a la costa, cuanto más lejos, más costoso.

 

El desierto rojo

La ciudad de Alice Springs es el punto de partida para explorar el desierto de Gibson. Popularmente conocido como el desierto rojo o el Outback, posee una superficie de 155 mil kilómetros de terreno arenoso y seco. La enorme extensión está poblada principalmente por tribus aborígenes y es posible conocer a muchas de ellas en Alice Springs.

A 150 kilómetros al sur de esta ciudad se encuentra la Reserva Henbury Meteorites Craters, una serie de 12 cráteres provocados por la caída de meteoritos hace diez mil años, que formaron huecos de hasta 180 metros de ancho y 15 metros de profundidad.

A menos de cuatro horas en auto hacia el oeste, se llega al enorme parque Mc Donnell, un territorio repleto de riscos y cañones, salpicado con lagunas y oasis de vegetación. Lo que alguna vez fue una cadena montañosa como el Himalaya, hoy ofrece curiosas cascadas y senderos de trekking. Los puntos de mayor interés son la garganta Glen Helen, el Valle de las Palmeras a la vera del río Finke, la brecha Simpsons, el desfiladero Standley (un precipicio de más de 80 metros de altura), la gran laguna de aguas heladas de Ellery Creek, los acantilados de Ormiston y las Ochre Pits (canteras ocres).

Al norte de Alice Springs, el Devil’s Marbles Conservation Park es famoso porque posee una serie de rocas redondas de granito de tamaño gigantesco, formadas hace miles de años como resultado de los movimientos geológicos de la zona. El parque es custodiado por los indígenas warumungu, según cuya mitología las rocas son huevos de la mítica la serpiente Arco Iris.

A 300 kilómetros de Alice Springs, el parque Watarrka ofrece su principal atracción: el King’s Canyon, una garganta de paredes de hasta cien metros de altura y color rojizo. Resulta indispensable caminar por los senderos que bordean el abismo y descubrir la sucesión de terrazas, las vistas sobre el valle, los oasis como el Garden of Eden, los reptiles y pájaros, y también fósiles de animales marinos.

Los dos polos

Uluru

Sobre la plana llanura del desierto, surge de pronto una inmensa mole de piedra de 348 metros de altura y 3,6 kilómetros de longitud, un colosal monolito de arsénica rojo y ocre, que como un iceberg sólo muestra un pequeño porcentaje de su inmensidad: el imponente monte Uluru.

La enorme roca es la mayor atracción del Red Centre australiano, una zona desértica de tierra roja que vivió aislada durante siglos en el territorio del norte. Para los Anangu -aborígenes de la región- el Uluru es cosa de los espíritus, un lugar mágico y sagrado que ha presidido su vida desde los orígenes. Es por eso que piden a los visitantes no subir al monte sino rodearlo, aunque muchas veces su pedido no es respetado.

La mejor forma de adentrarse en el territorio es hacer una visita por el parque con un guía aborigen. De esta forma se logra aprender sobre la fauna y flora del desierto y conocer sobre las ancestrales creencias de los Anangu. Basta con el recorrido alrededor de la base, de unos 9 kilómetros, para darse una idea de la imponencia del lugar, donde es posible descubrir también cuevas con arte rupestre. Otras caminatas proponen visitar los secretos de la vida cotidiana de los indígenas, o bien alejarse hasta el sistema de gargantas y valles de Kata Tjuta, no menos asombrosas. Sea como fuere la visita, el día finalizará con un ocaso y los rayos horizontales del sol iluminando la majestuosa roca teñida de un rojo tan furioso que parecerá hierro candente.

 

Gran Barrera de Coral

Cómo llegar

Desde Sídney se puede ir en auto o tomar un vuelo a Bundaberg o Harvey Bay.

Cuándo ir

La mejor época para visitar la Gran Barrera de Coral es en invierno (entre junio y octubre). Durante esos meses las temperaturas son cálidas y las lluvias son mínimas.

Must visit

Hinchinbrook
Lady Musgrave
Isla Fraser
Isla Lady Elliot

Dónde dormir

En Whitsundays:
Hayman Island, un bello resort ecológico cerca de Brisbane.
www.hayman.com.au 
En Cairns:
Shangri-La, The Marina. Cuenta con marina propia y ofrece un casi infinito abanico de servicios.
www.shangri-la.com/cairns/shangrila 
En Palm Cove:
Alamanda, un enorme hotel con varias piletas, restaurantes y bares con increíbles vistas al mar.
www.lancemore.com.au/alamanda

Desierto Rojo

Cómo llegar

Conviene viajar en avión o tren hasta Alice Springs. Para ver el monte Uluru se puede ir en avión hasta el aeropuerto Avis Ayers Rock.

Cuándo ir

Conviene visitar el desierto entre abril y octubre.

Must visit

Reserva Henbury
Parque McDonnell
Devil’s Marbles Conservation Park
Parque Watarrka
Monte Uluru

Dónde dormir

En Alice Springs la recomendación es Quest Alice Springs, que cuenta con modernos departamentos que incluyen todos los servicios de un hotel.
www.questapartments.com.au 
Cerca del monte Uluru se encuentra el Ayers Rock Resort con varias alternativas de hospedaje. Hay opciones románticas, y otras para familias o mochileros. Todos a una cómoda distancia del monte Uluru y con una imponente vista al desierto.
www.ayersrockresort.com.au/accommodation