Australia para ‘surfers’

Son sus playas paradisíacas, pero también la variedad, constancia y perfección de las olas que hacen de estas tierras, un destino soñado para los amantes del surf. Sol, naturaleza, casas rodantes y tablas bajo en el brazo en el país de los canguros.

Txt: Tamar Terzakyan Ph: Lucas Frigioni y Unsplash

Con la Ópera de Sídney y la Gran Barrera de Coral como estandarte, Australia es también la isla más grande del mundo. Expuestas al océano Índico en el oeste, Pacífico al este y el Antártico al sur, las costas australianas reciben un oleaje excepcional durante todo el año.

Por este motivo, el surf es uno de los deportes más practicados por los australianos desde 1915, año en el que Duke Kahanamoku, surfista hawaiano, llegó al país y enseñó como barrenar las olas de pie.

Al organizar un viaje por Australia, es probable que inmediatamente se caiga en la cuenta de lo grande que es en realidad. Para tomar de referencia, se necesita un vuelo de 6 horas para cruzarla de este a oeste; por este motivo, considerando que el tiempo es un limitante, los viajeros suelen elegir un área del país o dos para recorrer. Entonces… hay cuatro zonas principales que se destacan por el surf y que además son muy atractivas para visitar: Margaret River, la costa al sur de Melbourne, Sídney y sus alrededores, y Gold Coast.

El lejano oeste

Al oeste, a tres horas en auto de Perth, se encuentra Margaret River. Este pueblo playero escondido entre bosques y viñedos es el acceso a Surfer’s Point, un punto icónico, ya que es uno de los tres lugares de Australia que se elige para el Torneo de Surf Internacional. El oleaje en esta playa es espectacular y solo recomendado para surfistas experimentados. Pero a lo largo de la costa índica se esconden playas agrestes que ofrecen olas para todos los niveles, por ejemplo, a 20 minutos en auto de Margaret River se encuentra Yallingup, una buena playa para tomar clases.

La vibra surfera está impregnada en las callecitas de Margaret River. Hoteles tematizados, bares con bandas en vivo y ‘campervans’ estacionadas frente al mar con heladeritas llenas de cerveza a la espera de la puesta del sol. El ambiente es relajado y cálido con los turistas que llegan, porque por su lejanía con los otros lugares, son pocos los que priorizan esta costa.

Melbourne y Sídney son las ciudades más pobladas e importantes del país y están ubicadas a una hora de vuelo entre sí. Por esta razón, gran parte de los turistas extranjeros suelen visitar ambas. Para muchos, el tranvía, los callejones graffiteados, la amplia oferta de eventos culturales y lugares gastronómicos le dan a Melbourne aires europeos. Es muy atractiva para recorrer, pero para aquellos que buscan olas es necesario subirse a un auto y andar 95 km hacia el suroeste para llegar hasta Torquay, la capital australiana del surf. Allí es normal ver a decenas de locales en el agua con sus trajes de neoprene, puesto que, al estar más al sur y recibir el mar de Tasmania, la temperatura del agua es más fría.

Por Torquay también pasa la famosa Great Ocean Road, una ruta oceánica con vistas panorámicas fascinantes que se extiende por 100 kilometros y que pasa por otros pueblos surfistas como Apollo Bay y Lorne. En esta ruta también se encuentra la afamada Bells Beach, playa en la que se realiza el evento más antiguo de surf profesional, el Rip Curl Surf Pro, y que se caracteriza por la perfección y extensión de sus olas derechas. Se practique el deporte o no, esta playa es una parada obligada para todo aquel que transite este camino de asfalto.

Spot fotográfico – Los doce apóstoles.

Las playas de la ciudad

Desde la ventana del avión, Sídney ya impacta. Es fascinante ver desde el aire esta ciudad rodeada por el mar. Para una gran mayoría, suele ser el punto de llegada a Australia. Con un promedio de 230 días soleados al año, Sídney es un destino ideal para aquellos que buscan ciudad y surf. Para quienes eligen quedarse en barrios playeros, por lo general hay dos opciones: los del sur o los del norte de la ciudad. Dentro de los primeros se destacan Maroubra, Bronte, Tamarama y Bondi Beach, este último -a 20 minutos en tren del centro de la ciudad-, es el más popular. Se reconoce por los parques verdes que anteceden la arena, las parrillas públicas para cocinar y las rampas de skate. En este barrio hippie-chic es normal ver a la gente entrar en patas al supermercado, andar con una tabla bajo el brazo, correr bordeando el mar o hacer yoga.

Para interiorizarse con la vida australiana, es aconsejable despertarse un día a las 5:30 AM y bajar a la playa, dado la cantidad de gente que se puede observar practicando surf o algún otro deporte sobre la arena, con el amanecer de fondo.

En Bondi Beach hay surf para todos: principiantes, intermedios y avanzados. Por lo general, en el lado norte de la playa, hay un área designada para aquellos con ‘softboards’, tablas usadas especialmente para aprender.

Dentro de las playas del norte, a las que se llega principalmente en auto o en un ferry que sale con mucha frecuencia del puerto de la ciudad, sobresale Manly. Este barrio suele enamorar a aquellos que lo visitan, principalmente por su extensa costa custodiada por pinos. Al igual que Bondi Beach, ofrece olas para todos los niveles. Luego de Manly, hay una extensa lista de playas con oleaje para todos los gustos, que según el ‘swell’, orientación y vientos funcionan mejor un día u otro. Curl Curl, Narrabbeen, Whale Beach y Palm Beach, son algunas de las que más concurridas durante el fin de semana y para llegar a estas se sugiere alquilar un auto.

La costa dorada

A ocho horas en auto de Sídney, bordeando la costa este, se encuentra Byron Bay, otro de los pueblos surfistas por excelencia. De estilo bohemio y artístico, este lugar fue la meca de los surfistas australianos y ‘hippies’ de las décadas 60 y 70. De una belleza apabullante, suele estar en el itinerario de todo turista, practique el surf o no. Con mercados artesanales y un ritmo muy relajado, Byron Bay se caracteriza por sus ‘beach breaks’ -playas con fondo de arena-, el agua transparente y la alta posibilidad de surfear con delfines. The Pass es una de sus olas más conocidas y si bien en un día normal es apta para todo público, cuando el oleaje es bueno, se requiere nivel.

En el estado de Queensland, se encuentra Gold Coast. Con un estilo más miamense y con un clima veraniego todo el año, esta ciudad costera es sede de playas de renombre internacional, como Snappers Rock, donde también se realiza el torneo Quiksilver Pro. Quienes eligen este sitio suelen quedarse en Surfers Paradise, la zona de edificios altos frente al mar y donde toda la oferta turística está concentrada.

Si bien es posible tomar un vuelo de Sídney a Byron Bay o a Gold Coast, muchos viajeros suelen usar sus vacaciones para explorar esta región al estilo australiano. Es decir, partir desde Sídney bordeando la costa este en ‘campervan’ o casa rodante hasta Gold Coast o incluso más arriba. El viaje de un tirón dura –aproximadamente- 13 horas, pero el encanto radica en viajar lento, frenando en las incontables playas que hay, encontrando ‘spots’ en los que no hay más de 6 o 7 personas surfeando, descubriendo paisajes naturales e imponentes.

El país de las casas que ruedan

Australia es un país que respira ‘campervans’ y casas rodantes y, por ende, el ‘alquilar’ de las mismas es muy sencillo. Las primeras son combis remodeladas para poder dormir y suelen incluir accesorios útiles como sillas plegadizas, utensilios y un anafe para poder cocinar al aire libre. Las segundas son camionetas ya construidas para funcionar como casas y, por eso, la comodidad es otra. Suelen tener una cocina integrada, mesa, camas y baño. El tamaño varía según la cantidad de personas para la que esté preparada.

Las rutas en Australia están en perfecto estado y dada la popularidad de esta forma de viajar, y el hecho de que no está permitido dormir en cualquier lugar, la oferta de campings y Caravan Parks -sitios para estacionar los vehículos- es muy amplia. Los Caravan Parks suelen ofrecer dos modalidades de estacionamiento: con electricidad o sin. La primera suele costar alrededor de 30 USD la noche y la segunda, 25 USD. Asimismo, ofrecen facilidades como baños y duchas – que suelen ser muy limpias – , una sala de estar en común, área de juegos para niños y zona de parrillas o cocina. En verano, los australianos suelen elegir un Caravan Park para instalarse con su familia por quince días o un mes y la dinámica de comunidad que se genera en estos lugares es muy interesante. Los ‘campings’ son la alternativa para aquellos que buscan naturaleza, un cielo más estrellado y la posibilidad de prender un fuego por la noche.

 

Volar hacia Margaret River y recorrer la costa oeste, descubrir a través de Melbourne la costa sur o llegar a Sídney para partir en campervan hacia Gold Coast, son todas opciones tentadoras en un país que ofrece paisajes excepcionales, canguros en el camino, delfines en el mar y olas de calidad para todos los niveles. Sin dudas, Australia vive y siente el surf.

Cómo llegar
Latam, Qantas y Air New Zealand son las aerolíneas con más frecuencia de vuelos desde Buenos Aires a Sídney o Melbourne. Por lo general, hacen una escala en Santiago de Chile o en Auckland. El vuelo dura entre 17 y 20 horas, según la combinación. Si se prefiere recorrer la costa oeste, lo más conveniente es volar a Perth.
Visas
Es necesario solicitar de antemano una visa de turista (Visitor 600) para ingresar al país. Se puede aplicar online y es posible solicitarla por 3, 6 o 12 meses, pero es decisión de la embajada el tiempo de estadía que se otorga. Por lo general, los datos que se piden online son: número de pasaporte, fecha de entrada y salida del país, motivo del viaje y lugar de alojamiento. El valor de la visa es de 135 AUD.
Moneda
El dólar australiano. 1 USD equivale a 0.75 AUD.
Cuándo viajar
La mejor época de surf, donde el oleaje es más grande y potente, es en los meses de mayo, junio, julio y agosto, que coinciden con el invierno. Si bien desde Byron Bay hacia arriba es cálido, en Sídney y Melbourne es bastante más fresco y se requiere de neoprene para surfear. Diciembre, enero y febrero es verano y temporada alta. Para surfear sin frío y hacer viajes en ‘campervan’, esta época es mejor porque el día es más largo y se disfruta más al aire libre. Marzo, octubre y noviembre son buenas opciones para los que buscan olas, clima agradable y menos gente.
Dónde dormir
Sídney tiene muchísimas opciones de hospedaje, pero de querer quedarse en Bondi Beach, se recomienda Bondi Beach House, un’ bed & breakfast’ ubicado a 3 minutos caminando de la playa. Este sitio, además de tener una excelente ubicación, ofrece un ambiente distendido y cálido, en sintonía con la vibra playera del barrio. La cocina está a disposición de los huéspedes, así como la terraza. Se sugiere reservar con anticipación, porque disponen de pocas habitaciones.
bondibeachhouse.com.au
A 15 minutos en auto del centro de Byron Bay, enfrente de la playa Belongil, se encuentra Element of Byron Resort & Spa. Es un complejo inmerso en la naturaleza, entre lagunas, dunas y matorrales que ofrece ‘villas’ y ‘studios eco-friendly’. Si bien desde afuera las ‘villas’ parecen rústicas, en su interior son lujosas y están aggiornadas con mucho estilo. Por lo general, tanto los muebles como los objetos de decoración son de diseño de autor. La oferta gastronómica es excelente, al igual que los servicios de spa. También dispone de sectores asignados para hacer fuego y disfrutar a la luz de las estrellas.  elementsofbyron.com.au
Qué comer
Mejor dicho, qué tomar, ya que hay dos bebidas que enorgullecen a los australianos: el café y la cerveza. La cultura cafetera del país sorprende. Café Latte, Capuccino, Flat White, Macchiato; las opciones son múltiples, así como los lugares para comprarlo y tomarlo al paso. Si bien en todo el país el café es excelente, Melbourne es considerada la sede del mejor café. De visitar esta ciudad, se recomienda pasar por Industry Beans, un galpón convertido en local ‘trendy’, donde tuestan el café y crean sus propias variedades. Está ubicado en Fitz Roy, el barrio ‘hipster’ de la ciudad.
Como ex colonia inglesa, heredó el gusto por la buena cerveza y esta bebida es algo que los australianos disfrutan en todo momento. En The Local Taphouse, en el barrio de Darlinghurst, Sídney, ofrecen una degustación que vale la pena disfrutar. Para acompañar la cerveza, se aconseja pedir ‘wedges’, símil a papas fritas, pero más grandes y horneadas.
Consejo
De ser posible, recorrer parte del país -al menos durante unos días- en ‘campervan’. Es una experiencia única, de contacto directo con la naturaleza y que ofrece la posibilidad de salir del circuito más turístico. A su vez, por las facilidades que el gobierno brinda, Australia es un lugar preparado y seguro para hacerlo.